Maniático perdido.

Casi a la vez, y víctimas también de una cadena que se difunde entre los blogs mas deprisa que la gripe aviar en el sudeste asiático, los amigos Jordopo, Celtas y Myka Vykos me invitan a que publique mis manias personales en el blog.
Bueno, pues iros agarrando al sillón, que ahí va.

1- Una de ellas consiste en que la puerta del lugar en el que duerma, vamos, normalmente la habitación, debe de estar siempre cerrada. No vale con que este entrecerrada, con una rendijita. No. Ha de estar totalmente cerrada o soy incapaz de conciliar el sueño. Así haya 40 grados de temperatura y esto me suponga la asfixia, pero la puerta a cal y canto.

2- La siguiente, y que ya una vez la comenté, es que soy incapaz de leer, estudiar etc con un grado mínimo de concentración en otra posición que no sea tumbado. Si pretendo leer algo para empaparme de veras estando sentado o de pié me supone un esfuerzo muchísimo mayor. Por lo que parece mi mente no es capaz de memorizar algo y a la vez mantener el equilibrio de mi cuerpo. Así de limitado soy. Aparte, de que si se trata de disfrutar de la lectura, si no estoy tumbado, me resulta imposible.

3- Siguiendo con las manias sobre la lectura tengo también otra un poco absurda: si empiezo un libro soy incapaz, por malo que me resulte su contenido, de dejarlo a medias, ahún a sabiendas de que no me gusta lo que estoy leyendo. En toda mi vida creo que han sido solamente dos los libros que he dejado sin terminar.

4- Una que provoca la hilaridad e imitaciones de mis conocidos: al terminar una conversación telefónica repito al menos cuatro o cinco veces, sin poder evitarlo, pese a que normalmente cuando llega ese punto de la conversación ya se descojonan, las palabras "Hasta luego" (abreviado: "ta luego, ta luego, ta luego, taluego").Imposible para mi no hacerlo, mal que me pese.

5- Y la última ( la última que puedo poner, ya que solo son cinco, si no me estaria aquí hasta mañana) es que ODIO con todo mi ser que me toquen la cabeza. Pese al escaso valor del contenido de mi cráneo el que alguien mantenga un contacto físico ( OJO: obviando cierrrrrrrtas situaciones, jejeje) con mi cabezón puede desatar mis iras instantaneas y un odio de por vida. Vergonzoso, si, pero cierto.

Pues nada, espero que tras conocer un poco más de mi ¿personalidad? sigais teniendo la suficiente entereza para pasaros por aquí.
Y como tengo que devolver la pelota a otros cinco, tras rezar 8 padrenuestros a San Judas Tadeo para que todos mis deseos se cumplan, o un rayo fulminador me partirá en dos, ahí dejo el encarguito "maniático" para que vosotros hagais lo propio:

Vampiresa del blog Leo, leo...¿que lees?
Sergio de 221B Baker Street
Juan del blog elrinconcillo
Juanmito de Zumo de Zigurat
Y Pedro de Un tebeo con otro nombre.