jueves, junio 15, 2006

Locuras de los años 70: los comics de artes marciales.

Lo bueno de los dias lluviosos, cuando estás de vacaciones, es que a veces también tienen su resultado, como este post de hoy, o la patochada de la tarde de ayer y que podeis leer un poquito más abajo.
Ayer, por la tarde, y presa de ese aburrimiento, me dediqué a realizar un poco de arqueología literaria en el caos que siginifica el cuarto de los libros de mi casa paterna ( para más información, ver post anteriores que ya no me acuerdo ni de donde están).
Ojeando al buen tuntún cosas de lo más diverso encontré una que me hizo especial gracia, ya que en su momento fueron unos comics que devoré con gran ansiedad.
Se trata de 12 números de la Editorial Vértice publicados allá por los años 70, lo cual como vereis a continuación explica su temática, y que entran dentro del epígrafe que aquella editorial denominó Relatos Salvajes.Estos doce comics en mi poder pertenecen, concretamente, a una edición especial, que llegó hasta los 52 números en su volumen I y hasta los 14 en su volumen II, y designada como ARTES MARCIALES (Judo, Kárate, Kung Fu). Lo transcribo tal cual como podeis verlo en la portada del tebeo, no creais que os estoy recordando las orientales técnicas de la lucha cuerpo a cuerpo.
Creo que fué con 10 u 11 años cuando me leí esos tebeos por primera vez, la verdad no lo recuerdo exactamente.

Si recuerdo, sin embargo, que me causaron gran impresión, me imagino que como a todo chavalín cuando se "flipa" por primera vez con cualquier película , tebeo o lo que sea, relacionado con el kárate y estas cosas.
Contribuyó, supongo, la forma de la edición, en blanco y negro, aunque ya a tamaño grande, con 82 páginas, agrupando números de las colecciones USA originales, tema que trataré luego (espero que con acierto, y si no, agradecería cualquier corrección, pues estoy bastante pez en este tema), que le daba a los comics , desde mi infantil perspectiva, un tono sombrío, duro, mucho más crudo que los tebeos de, por ejemplo, La Patrulla-X que había empezado a reunir.
Aquellos tebeos eran un compendio de violencia callejera en barrios marginales, conspiraciones de traficantes a nivel mundial, historias de discriminación, senderos de pureza y perfeccionamiento, misticismo oriental y transmitian ese aire amargo y social tan propio de los años 70.
Herederos, como no, de las películas de artes marciales que supusieron un auténtico boom en esa década, así como de las prácticas de este tipo de deportes en la sociedad occidental.
Otra secuela de esta moda setentera tambien fueron las revistas especializadas en el tema que hasta hace no tanto ocupaban lugares destacados en cualquier kiosko que se precie.
Volviendo a los comics, y ahora ya a su contenido, y dentro de esa temática aglutinadora y basada en las artes marciales, los relatos que Vértice nos ofrecía correspondían, principalmente, que hay más, a conocidos personajes a día de hoy: Shang-Chi, Puño de Hierro, Los hijos del tigre, Tigre Blanco y Las Hijas del Dragón.Shang-Chi era , entre todos ellos, y en aquel momento, el más importante.

Creado por Steve Englehart y Jim Starlin, hace su primera aparición en Special Marvel Edition #15 en Diciembre de 1973, una colección que hasta ese número había publicado historias de superhéroes.
La prueba del éxito de este personajes está en que, a partir de su número 17 el Special Marvel Edition pasa a llamarse The Hands of Shang-Chi: Master of Kung Fu.
Este héroe oriental desarrolla sus aventuras en ambientes de lo más variopinto: desde templos orientales a oscuros callejones del Bronx o Chinatown.
Shan-Chi, hijo ni más ni menos que del mísmisimo Fu Manchu, es una especie de Bruce Lee del comic, salvando las diferencias.
El personaje sobrevive en nuestros dias, habiendo tenido apariciones en colecciones como X-Men, Spiderman, etc y (por favor, haced todas las correcciones que sean oportunas) se engloba ahora dentro de la línea Max.
Las aventuras de Shang-Chi eran de las que más me gustaban, y abrían además cada uno de los tomos de Vértice.

NOTA: El Vol I de Vértice es, en parte al menos, la edición del Magazine Marvel Deadly Hands of Kung Fu, que también agrupaba los números de las colecciones individuales de los personajes arriba citados. El resto de materiales, hasta completar los 52 números que lo compusieron desconozco en muchos casos su origen
El Vol II, por contra, y editado bajo el sello Mundicomics, reunía solo los números de The Hands of Shang-Chi: Master of Kung Fu, con lo cual puede considerarse una reedición de sus aventuras en la colección original. FIN DE LA NOTA.

Era un tio duro que con sus manos y sus pies lo mismo se enfrentaba a una turba de ninjas que le dejaba bien claro a un borracho maltratador que esa no era la forma de resolver los problemas familiares.
El dibujo de autores como Starlin, Gulacy, Pérez, etc, te transmitia la sensación , en esas poses más creibles que las que tuvimos que soportar 20 años despues, de que cuando el protagonista daba una patada, un puñetazo o saltaba aullando como un loco, algún hueso de su contrincante terminaría hecho añicos.
Eran los 70 y el auge de las artes marciales. Así que Marvel, ni corta ni perezosa, agrupó a los héroes que reunían estas características en una publicación denominada Deadly Hands of Kung Fu, que duró 33 números y de la que Vértice extraía los materiales para el Vol I, como ya os dije.

Continuando con la galería de personajes, tenemos al que, probablemente, conocerá la mayoría de los aficionados: Puño de Hierro.
Otro personaje setentero típico: el americano que, tras una experiencia más o menos traumática emprende su propio viaje iniciático, alcanzando la perfección gracias a las técnicas orientales de lucha y concentración.
El rubio Daniel Rand tuvo colección en esa década, con un tandem que luego se haría archiconocido:Chirs Claremont y Jhon Byrne. No obstante, su paternidad se debe a otros dos grandes colosos: Roy Thomas y Gil Kane.
Muchos de los episodios del equipo Claremont/Byrne, si no todos, repetiré mi desconocimiento sobre la totalidad del Vol I de Vértice ( ¡¡ayuda!!), pueden encontrarse entre estos Relatos Salvajes,a medida que avanza la colección.
Quizá esta fue la forma de continuarla una vez se hubo terminado el material del Deadly Hands of Kung Fu, pero lo ignoro (sihg..).
Más tortazos a diestro y siniestro, aunque esta vez el personaje si tiene una especie de superpoder, si es que podemos llamar así a la técnica mediante la cual concentra toda su fuerza en el puño que da origen a su apodo de guerra.
Poco despues Puño de Hierro formaría un duo con Power Man, héroe setentero y étnico por antonomasia, para constituir los afamados Héroes de Alquiler, con su propia y fructífera colección, resucitada a finales de los 90 durante la ausencia del resto de superhéroes en la saga Héroes Reborn.

Avanzando dentro del resto de colecciones-personajes del subuniverso del kárate y Kung-Fu, es obligado mencionar a un trio probablemente un poco menos conocido: Los Hijos del Tigre.Lin Sun ,chino, Abe Brown, un negro norteamericano y Robert Diamond un actor blanco de Hollywood componen un terceto tan colorista en integrante que llama de por si la atención.
Los padres de los trillizos no son ni más ni menos que Gerry Conway y Dick Giordano, en las páginas de Curtis Magazines , una extensión de Marvel que editaba comics sin pasar por el Comics Code Authority, entre ellos muchos de estos que os hablo.
Esto puede dar una idea del tipo de historias y temáticas que nos encontramos: violencia, drogas, marginación, etc.
Unidos por un amuleto a modo de collar, compuesto por una cabeza de tigre y sus correspondientes garras (tamaño mini, of course), las ensaladas de guantazos de un grupo que Vértice presentaba en su primer número como ( copio literalmente): " Uno blanco, uno negro, otro amarillo... todos unidos en una fantástica y novísima historia", son totalmente memorables.
A mi, estos tres me hacían especial gracia, quizá casi tanta como Shang-Chi, más que nada porque, a cuantos más miembros de un grupo, mayores y mejores peleas.
Y si las dibuja George Pérez y las guioniza Bill Mantlo, miel sobre ojuelas.
Tuvieron aguante suficiente hasta el número 19 de Deadly Hands of Kung Fu, cuando, y si no recuerdo mal tras una memorable pelea, dejaron sus amuletos para dar paso al siguiente héroe karateka de barrio.

Se trata del Tigre Blanco.
Aclarar que yo solo hablaré del primer tigre blanco, un portorriqueño (seguimos con el tema étnico en las colecciones de artes marciales) llamado Hector Ayala, que es quién recoge los amuletos abandonados por los antecesores en el cargo, y que se encarga ahora de impartir justicia con el canto de la mano en la vertiente hispana y latina del Bronx Sur , en Nueva York.
El Tigre Blanco, que también me gustaba lo suyo, ya adopta un corte más superheroico, con un uniforme menos dado a sutilezas orientales, con incorporaciones como la máscara de una pieza.
Por cierto, ¿soy el único al que, mucho despues, la aparición del androide Zero en las páginas de X-Force, le recordó al uniforme del Tigre Blanco?.
A dia de hoy, y en un espectacular ejercicio de travestismo, el Tigre Blanco es una estupenda señorita que se llama Ángela del Toro. La vida, que tiene estas cosas.

Y para finalizar ya lo que probablemente sea una sarta de incorrecciones históricas en cuanto a referencias (para eso estais vosotros) citar a el duo , este si conocido por todos, llamado Las Hijas del Dragon, con las incombustibles Colleen Wing y Misty Knight dando lecciones de feminismo episodio si, episodio no.
Con total interacción con el resto del universo márvel estas dos eternas secundarias aparecieron tambien en algunos números del Deadly Hands Of Kung Fu y, me imagino, ya que no tengo ese material, en el Vol I de Relatos Salvajes-Artes Marciales, de Vértice.Un último apunte que no quisiera dejar de destacar y que, visto ahora me ha hecho especial gracia.
Vertice, y no se si la edición americana, quizá si, puede que incluso esos materiales tuviesen el mismo origen que los comics, editaba en algunos números artículos sobre todo lo relativo a los estilos de lucha orientales, referencias a personajes de moda por aquel entonces ( Bruce Lee, David Carradine...) en incluso descripciones con dibujos de golpes para su práctica cotidiana e infumables disquisiciones sobre la pureza del alma y el camino de la perfección.
Si, amigos lectores, antes las editoriales sabían cuidar de los suyos, y no como ahora...

¡¡¡¡ KIAAAAAAAAAAAAAA!!!!!!

8 Comments:

At 8:57 p. m., Anonymous Anónimo said...

Recuerdo con nostalgia las revistas de comic españolas de artes marciales con dibujos de Jordi Bernet y José Ortiz.

Y la peor película de artes marciales de todos los tiempos:
¡Karate contra la mafia!

 
At 9:31 p. m., Blogger Redivivo said...

Ufffff, es que lo de las artes marciales da para mucho, tanto en los comics como en el cine, la tv...
Y eso que solo he tocado tebeos de la Marvel, que me imagino que DC haría tres cuartos de lo mismo para llevarse su parte de la tajada ante el furor karatekil.

 
At 10:03 p. m., Anonymous Anónimo said...

A mí, como fan de las novelillas de Sax Rohmer de Fu-Manchú, lo de Shang-Chi me encanta porque tiene detalles que mantienen la continuidad con aquellas historias, no se las saltan a la torera. Vaya hijo tenía el Doctor, ¡un karateka!

 
At 10:26 p. m., Blogger Jordojopo said...

-Aquí tiene a su bebé
-Y qué ha sido Doctor?
-Ha sido un post de puta madre, enhorabuena.

 
At 10:51 p. m., Blogger Redivivo said...

Cierto, se me olvidó mencionar que Marvel compró los derechos del personaje Fu Manchu para adaptarlo a su propio universo, pero manteniendo pinceladas del anterior, Hellpop.

Jordo, gracias por el alago al posto, joder, algo tenía que hacer para compensar el cagarro de la tarde del miércoles, vamos, digo yo.

 
At 11:34 p. m., Blogger etrigan said...

¡¡Qué post más bueno!! Enhorabuena. Es que yo soy un gran fan de aquellos tebeos. Todavía añoro a los Hijos del Tigre de Conway y George Pérez. Y aquellos pantalones acampanados, y los peinados de los negros con todo el pelo cardado como si fuera un casco, y la música disco, y los nunchakus, y las academias de Kárate, y las pelis de Bruce Lee, y las...

 
At 5:37 p. m., Anonymous Anónimo said...

Gran post, sí señor. Siempre he querido echarle un ojo al Shang-Chi de Moench y Gulacy.

 
At 6:32 p. m., Anonymous Anónimo said...

Enhorabuena fue uno de mis personajes favoritos el problema es que en internet sólo se encuentran los comics recientes con la nueva estética y no los clásicos en blanco y negro. Llegué a tener los primeros números pero mis préstamos a conocidos me hicieron perderlos al igual que otros grandes de aquellos tiempos como el sargento trelawny (bélico) o texas jack al igual que con las antiguas péliculas destacaban grandes historias con buenos dibujos aunque fueran en blanco y negro

 

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